e martë, 26 shkurt 2008

Paradigma

Desarrollo de la Teoría Humanística de las organizaciones

Presentación.

El presente trabajo corresponde a la evaluación de la Unidad I “Teorías y enfoques tradicionales de estudio de la Organización”, de la materia Teoría de las Organizaciones a cargo de la profesora Irma Silva Franco, en el sexto semestre de la carrera de Comunicación.

Para llevar a cabo la evaluación se recurrió a la elaboración de un producto comunicativo, el cual fue creado en primer lugar como una práctica para ser evaluada y en segundo lugar como meta personal del equipo para sistematizar toda la información vista en la primera unidad. Al saber que se tendría libertad en el formato, nos inclinamos por hacer un CD Interactivo, el cual está conformado por un mapa mental, donde se abordan los dos temas fundamentales de nuestra unidad: “La escuela clásica” y “La escuela humanística” de las organizaciones.

Es importante hacer este tipo de trabajos, ya que la elección del material a elaborar (CD Interactivo) es práctico y útil en cuanto a la presentación de los temas antes mencionados, sin embargo tiene como principal función la síntesis y auto evaluación de lo que aprendimos en la unidad, ya que gracias al mapa mental uno se puede dar cuenta de qué tanto entendió o no al tener que realizar relaciones entre los temas vistos.

Al igual cabe mencionar que la elección del material que se elaboró es de gran relevancia, ya que ahora los productos comunicativos al ser más visuales son más atractivos que un trabajo escrito, el cual limita más el potencial que se podría mostrar con un trabajo interactivo, elemento que fue tomado en cuenta para captar la atención de nuestros compañeros al exponer dicho trabajo.

Objetivo:
Realizar y presentar un CD interactivo que aborde los temas de la escuela clásica y la escuela humanística de las organizaciones, por medio de un mapa mental para evaluar la primera unidad.

Desarrollo:
La técnica que se utilizó fue la presentación en Power Point, que de entrada comienza con el mapa mental que da la sistematización de toda la información vista, para luego dar paso a hipervínculos que fueron colocados en cada punto para que de esta manera se pueda desglosar la información, del mismo modo también se encontrarán algunos videos que nos ayudarán a comprender mejor la explicación de los temas.

El mapa mental se centra en la explicación de los temas base de la Unidad 1, aunque cabe señalar que el desarrollo del trabajo se centrará y profundizará más en la escuela humanística, sin dejar a un lado la escuela clásica que es pieza fundamental para comprender el funcionamiento y estructura de las organizaciones.

La logística fue sintetizar y realizar las diapositivas correspondientes, esto se hizo repartiendo los puntos de información, los cuales se fueron desglosando y a su vez colocados por medio de hipervínculos en el mapa central.

La información que se presenta en el CD está respaldada por medio de bibliografía. Los libros que se ocuparon fueron:
Mayntz, Renate. Sociología de la organización, Madrid, Alianza Universidad, Colección Ciencias Sociales, 1990
Fernández Collado, Carlos (coord.). La comunicación en las organizaciones; México, Trillas, 1990
Álvarez, Felipe. Teoría de las organizaciones; Argentina, Eudecor, 1999

Otra cosa que cabe mencionar, es que este trabajo que dio como resultado un producto comunicativo, se subió al blog del equipo aiparadigma.blogspot.com, el cual tuvo de pretexto la materia de Semiótica en semestres pasados, ya que creemos que aún más allá de que a los compañeros de grupo pueda servirles, también puede ser de utilidad a alguien como un panorama de las organizaciones, el cual se pondrá a disposición de quien lo quiera consultar en Internet.

Conclusiones.
El hecho de realizar un producto comunicativo, en este caso el CD Interactivo es de suma importancia en cuanto a la estrategia de aprendizaje, ya que de esta forma se pudieron reafirmar los temas que se veían en clase, tal como una auto evaluación. Además de que el hecho de realizar mapas mentales tuvo un peso considerable en este trabajo, ya que es una manera de explicar de una forma más eficaz y comprensible los temas que se abordaron durante la Unidad 1.

Aunque también tiene un grado de dificultad, ya que al llevar a cabo la síntesis de los temas para realizar las diapositivas y desglosar los puntos, fue importante definir la forma en que se iba a organizar toda la información utilizada, además tratar de acomodarla e ilustrarla con las imágenes y videos para que fuese una red entendible, ya que sí es un poco complicado pasar un tema teórico a una expresión visual, pues sólo es entendible cuando tiene una buena conexión entre los temas, es decir entre lo escrito y las imágenes.

Por otro lado también cabe señalar que fue de gran ayuda la forma en que se evaluó la Unidad, ya que así se reafirmaron la escuela clásica y la escuela humanística, tema en el que nos enfocamos más, ya que nos llamó más la atención, pues fue desde esta perspectiva como pudimos entender más la conformación y el funcionamiento de las organizaciones, que era uno de los objetivos que se tenían planteados para esta primera etapa del curso.

Integrantes del equipo:
Barcena Quintero Brenda.
Gutiérrez Vega Yazmín.
Lagunas Anaya Dulce María.
Melo Zamarripa Norma Deyanira.
Ramos Puebla Karina.

Mapa mental

Teoría mecanisista


VIDEO SOBRE LA BUROCRACIA (SÁTIRA)

Teoría humanista


VIDEO SOBRE LA PIRÁMIDE DE MASLOW

Bibliografia

Introducción

El presente trabajo es un análisis de una forma simbólica en los medios de comunicación, usando la técnica del análisis semiótico y tomando como base del trabajo a la teoría de la hermenéutica profunda.

La forma simbólica que se analiza es el reportaje de la revista Proceso “Hacia el Spotegate” publicado en el año 2006 poco tiempo después de que se supo que el nuevo presidente era Felipe Calderón. El objetivo general de dicho análisis es saber cuál es el mensaje que se pretende dar al receptor a través del reportaje.

Los objetivos particulares son: descubrir cuál es la relación de las teorías de la comunicación para poder hacer el análisis de cualquier medio de comunicación y de esta manera reflexionar sobre el contenido de ideológico de los medos de comunicación masiva.

El equipo justifica dichas acciones debido a la petición del profesor de Investigación en Comunicación III, Daniel Lara Sánchez, porque por medio de tal encomienda realizamos el análisis ideológico del artículo de la revista Proceso debido a que nos interesa saber cuál era la intencionalidad del medio al publicar dicho texto.

En el interior del trabajo se encontrará primero con el capítulo teórico que retoma como ya se dijo, la teoría base que es la hermenéutica profunda, además de las teorías comunicativas de Humberto Eco y Charles Sanders Pierce.

En un segundo capítulo se habla del análisis de contexto socio-histórico, que toma en cuenta la institución que crea a la forma simbólica, los escenarios espacio-temporales, los medios de transmisión y las estructuras sociales que permiten que la forma simbólica sea de determinada manera.

Posteriormente el tercer capítulo es la aplicación de la técnica elegida para el análisis, en este caso es la de análisis semiótico para así poder llegar al capítulo cuarto que es donde se da una reinterpretación con lo conseguido al hacer la investigación.

Este capitulo es sustancial dentro del trabajo ya que contiene los amarres entre la teoría, el contexto y la metodología, los puntos de utilidad en relación con la técnica elegida, los contenidos de la forma simbólica en cuanto a la posible intención de su productor, la ideología de fondo y la reflexión sobre los medios de comunicación masiva a la que se pretende llegar como un de los objetivos del trabajo.

Metodologia

Con base en la orden de trabajo del profesor Daniel Lara Sánchez, se decidió hacer una búsqueda en los medios de comunicación masiva para encontrar la forma simbólica de interés para ser analizada, hasta que se tomo la decisión de usar el articulo “Hacia el spotgate” de la revista Proceso.

Una vez seleccionado el material, se realizaron los puntos que el profesor nos pidió: el capitulo teórico que es el sustento del trabajo, el análisis de contexto socio-histórico, el análisis discursivo y por último la reinterpretación que contienen las conclusiones del trabajo realizado. Todo lo anterior se realizó bajo la técnica de análisis semiótico, con apoyo de la hermenéutica profunda y las teorías Humberto Eco (modelo de análisis estructural de los mensajes) y Charles Sanders Peirce (semiosis).

Capítulo teórico

Hermenéutica Profunda

El marco metodológico que se esbozará puede ser descrito como una forma de "hermenéutica profunda". Existen varias razones por las que una metodología de hermenéutica profunda proporciona un marco adecuado para el análisis cultural. En primera instancia, es un marco apropiado porque el objeto de análisis es una construcción simbólica significante que requiere de la interpretación.

En la medida en que se considere el contexto socio-histórico y la mediación institucional de las construcciones simbólicas y siempre y cuando estas construcciones estén estructuradas de ciertas maneras, se puede emplear también, otros métodos de análisis. Estos métodos pueden ilustrar varios aspectos del ámbito del objeto y por lo tanto pueden facilitar el proceso de la interpretación. De ahí que, podamos hablar de una "hermenéutica profunda". Estas técnicas no substituyen al proceso de interpretación sino más bien lo enriquecen, no agotan el análisis sino lo profundizan y lo desarrollan. De ahí que, la metodología de hermenéutica profunda proporciona un marco que respeta la complejidad y lo característico del ámbito del objeto. Se distinguen tres fases básicas de procedimientos que son parte de la metodología de hermenéutica profunda. Estas fases no deberían ser consideradas como estadios discretos de un método secuencial, sino más bien como dimensiones teóricamente distintas de un proceso interpretativo complejo. Los individuos se encuentran ubicados en ciertas posiciones dentro de estos campos y utilizan los recursos a su disposición para producir, transmitir e interpretar objetos y enunciados significativos.

Un ejemplo familiar se encuentra en Barthes (Barthes, 1973). La portada del Paris-Match está ilustrada con la fotografía de un joven soldado negro en un uniforme francés; el joven está saludando, sus ojos levemente levantados, como si estuvieran fijos en la enseña tricolor. Esta rica yuxtaposición de imágenes forma una estructura a través de la cual se transmite el significado del mensaje. Si se cambia un aspecto de esta figura el soldado negro por un soldado blanco, si se le viste con un uniforme de guerrilla en lugar de un uniforme francés, o si se le pone a la portada Liberation en lugar de Paris-Match, cambiaría el significado transmitido por este mensaje. Este ejemplo tiene que ver prioritariamente con imágenes más que con palabras, sin embargo, los rasgos y las relaciones estructurales de los enunciados lingüísticos pueden analizarse formalmente. En tales casos podemos hablar de un análisis discursivo, es decir, un análisis de los rasgos y relaciones estructurales del discurso. Estos ejemplos forman unidades lingüísticas que por lo general rebasan los límites de una sola oración. El análisis discursivo de dichas unidades puede contribuir a poner de relieve, por medio de diferentes métodos, los rasgos y relaciones estructurales que caracterizan a estas construcciones lingüísticas. La tercera fase de la metodología de hermenéutica profunda puede denominarse apropiadamente como interpretación. El proceso de interpretación se construye sobre la base del análisis histórico y discursivo; retoma los hallazgos aportados por estos análisis y los emplea como elementos de una interpretación creativa y constructiva. Pero aunque retoma estos hallazgos la interpretación no se agota en ellos.

Por muy rigurosos y sistemáticos que sean los métodos del análisis formal o discursivo, estos no pueden evitar la necesidad de una construcción del significado, es decir, de una explicación interpretativa de lo que es representado o dicho. Al explicar lo que se dice o se representa, el proceso de interpretación transciende el dominio de la construcción simbólica: formula un significado probable y ofrece una versión que puede ser arriesgada y estar abierta a la discusión. Las construcciones simbólicas son representaciones de algo; el discurso dice algo sobre algo, es este carácter trascendente el que tiene que ser incorporado. La interpretación une diferentes elementos de una manera específica, por lo tanto proyecta significados posibles, explica lo que la cons-trucción simbólica puede representar o afirmar. Este proceso interpretativo es una actividad creativa, imaginativa que trasciende el ámbito de las construcciones simbólicas vistas como sistemas estructura-dos e involucra al interpretante en una arena marcada necesariamente por riesgos y conflictos. Por ende, el proceso de interpretación da lugar a un conflicto potencial de interpretaciones, plantea problemas sobre las relaciones entre una interpretación y la otra, incluyendo aquellas interpretaciones de los sujetos que constituyen el mundo social.

Ahora. La tradición de la hermenéutica nos señala ciertos aspectos de nuestro objeto de estudio que no se deben perder de vista. Nos señala, primero, que el objeto de nuestra investigación enunciados, acciones, textos, construcciones simbólicas de varios tipos es un campo preinterpretado. Las construcciones simbólicas son ya en sí una interpretación, por lo tanto analizarlas equivale a producir una interpretación sobre una interpretación, a re-interpretar un dominio preinterpretado. Los individuos en sus actividades cotidianas utilizan constantemente procedimientos interpretativos para entenderse entre sí y a los demás, para comunicarse el uno con el otro y para lograr objetivos particulares. Esta hermenéutica de la vida cotidiana constituye la base práctica de las construcciones simbólicas que nosotros pretendemos interpretar. La tradición hermenéutica también nos señala que las construcciones simbólicas son construcciones de un sujeto.

Pero estos enfoques, por muy interesantes que sean, no ponen la atención suficiente en las maneras en que los diferentes individuos o grupos interpretan activamente los mensajes de los medios y los integran a diversos aspectos de sus vidas. Las distintas fases del procedimiento de hermenéutica profunda pueden contribuir a la exploración de lo que podemos describir como los modos de recepción de los mensajes de los medios.[1]

Finalmente el objetivo que se pretende al exponer el texto anterior es justificar, dar una explicación acerca de la base epistemológica y de la base teórico metodológico que se tiene para armar el siguiente trabajo de análisis semiótico que se desarrollara a base de una hermenéutica profunda como marco teórico.

Teoría de Charles S. Peirce

Charles S. Peirce: Su planteamiento se encuentra basado en su teoría de los signos que el denomino “Semiótica”, en la cual se encuentra contenida la teoría triádica del signo, donde se muestra una relación triple que consiste en un representamen (el signo mismo) que mantiene la relación con un objeto, relación que a su vez implica un interpretante.
El signo o representamen es algo que está en lugar de alguna otra cosa para alguien en ciertos aspectos.
El objeto es lo representado por el signo/representamen
Un objeto inmediato: el objeto tal como es representado por el signo.
Un objeto dinámico el objeto independiente del signo que lleva a al producción de éste.

El signo de Peirce no funciona por sí mismo sino como una manifestación de un fenómeno general. Peirce identificó tres categorías de fenómenos, que denominó:
Primeridad: no tiene relaciones, no se la tiene que concebir en oposición a otra cosa y es sólo una posibilidad.
Secundariedad: es le ámbito de los hechos en bruto que surgen en una relación.

Vehículo sígnico o representamen.
Lo que actúa como signoTerceridad: Es el elemento mental

Con su énfasis en la figura del interpretante, como su clasificación triádica de los signos en:
ü Iconos: Es un signo que representa a su objeto predominantemente por similitud o semejanza.
ü Índices: Es un signo donde hay una relación de causa-efecto con el objeto al que representa: No tiene la característica fundamental de querer significar algo por sí mismo. La interpretación es por experiencia.
9Símbolos: Es un signo cuyo carácter representativo consiste precisamente en que él, es una regla que determina a su interpretante. Para comprender su funcionamiento es necesario conocer el código en donde se relacionan.


Cabe mencionar que los planteamientos serán usados cada uno en complemento del otro, ya que el planteamiento de Umberto Eco será utilizado para desmenuzar el sintagma mientras el planteamiento de Charles S. Peirce, será utilizado como herramienta de interpretación, este paso será visto por la Agencia de Investigaciones como una contextualización del sintagma.

Hay que recordar que a través de Ferdinand de Saussure podemos identificar la dilucidación de “sintagma” como la selección de una unidad de un paradigma, que generalmente lleva a la combinación con otras unidades de las cuales recibe su mismo nombre (sintagma).Lo importante de los sintagmas son las reglas o convenciones según las cuales se hace la combinación de unidades en el lenguaje.

Al igual es de suma importancia mencionar que para este análisis se observa un fenómeno curioso el cual es ver como un componente que fue usado en un medio electrónico es fragmentado y tomado sólo aquello que le intereso al autor para este reportaje. Ya que las imágenes contenidas en este reportaje fueron captados de comerciales de los candidatos en la contiende por la presidencia y de estos el reportero congelo y extrajo la imagen que más le “convino” para el reportaje.

Con este respectivo planeamiento teórico este análisis alcanzaría su principalmente propósito llenando el objetivo de ser una invitación a quien lo lea de mostrarle como se aplica los planteamientos semióticos a la interpretación de signos. Se pretende llegar a despertar una conciencia semiótica e ideológica en el lector, para que éste considere concientemente el papel de los signos y los medios en su entorno. Además que al ser un tema tan cercano a la población por medio de este análisis se busca dar una visión de cómo poder interpretar las imágenes políticas de cada partido político.

El análisis se torna interesante por el hecho de que muestra como los medios en este caso Proceso tiene una intención de cómo coloca los elementos en el sintagma que enfatiza el hecho de cómo en las comunicación el emisor hace una estricta selección de los signos que coloca y de cómo los coloca en el sintagma.

Teoría de Umberto Eco

Umberto Eco: Su planteamiento nace de una síntesis productiva de prácticamente todas las escuelas de semiótica del siglo XX. Dentro de sus aportaciones dos de sus grandes conceptos son el texto “cerrado” el cual permite un sinnúmero de interpretaciones; texto “abierto” que implica un lector modelo. Para Eco la concretización se lleva a cabo por una serie de pasos para codificar los signos, al cual da como consecuencia la posibilidad de una semiósis ilimitada.

El planteamiento de Eco le lleva a preguntarse ¿Cómo lograr entonces que esa semiósis tenga un propósito determinado? o ¿Será que un texto tiene tantos sentidos como lectores? Lo cual lleva a Eco a determinar que la semiósis puede implicar el desplazamiento de un interpretante a otro, pero para Peirce hay un objetivo detrás de todo esto.

Por otra parte para Eco la asociación entre signos no se da en forma arbitraria o caótica; está guiada por los medios habituales que utilizamos los humanos como comunidad para hacer inferencias. La búsqueda que representa la semiósis ilimitada está dirigida al objetivo de un interpretante final. El interpretante final también es el hábito, una disposición a actuar sobre el mundo. Y la semiósis va construyendo el mundo mediante la relación de los interpretantes inmediatos y finales.

Según Eco el objeto real es lo que finalmente se obtiene como resultado de la información y el razonamiento. Lo real es el significado intersubjetivo al que llega una comunidad en la semiósis. Es así que si el signo no revela la cosa, el proceso de semiósis produce, a la larga, una noción socialmente compartida de la cosa, que la comunidad se compromete a adoptar como verdadera. Las interpretaciones que se realicen estarán basadas en principios consensúales y es tarea de la semiótica descubrir esos principios.

Para este trabajo en específico se utilizara el método plateado por Umberto Eco sobre el análisis de las imágenes. Su método para el análisis de las imágenes visuales consiste en dividir el sintagma en sus partes fundamentales, tomando en cuenta tres aspectos:
Registro visual
Registro del mensaje escrito
Relación entre los dos registros (interpretación)

Por otra parte Umberto Eco en su libro “La estructura Ausente” retoma conceptos importantes para este análisis. Uno de ellos es la denotación la cual menciona que la denotación es una modalidad elemental de una significación alegada por el referente. Que en este texto es la denotación del significante aislado (que en lingüística se puede llamar lesema que remite a una unidad cultural).

La definición de denotación se aplica a tres categorías de significantes que suscitan normalmente una serie de aporías semánticas: a) los términos sincategoremáticos; b) los nombres propios; c) los significantes de sistemas semióticos puramente sintácticos. Por lo que se refiere a los sincategoremáticos la respuesta ya está implícita en el hecho de que sea posible construir un campo semántico de términos que no se refieren a los objetos externos, sino que revisen funciones gramaticales.

Por lo que se refieren a los nombres propios, éste es similar al problema de los signos icónicos que se refieren con toda probabilidad a alguien, sin que exista un código que establezca exactamente quién es este alguien.

Por otra parte al ver a la connotación en una perspectiva semiótica se encuentra con que la connotación es el conjunto de todas las unidades culturales que el significante puede evocar institucionalmente en la mente del destinatario.
a) Connotación como significado definicional: Todo lesema connota las propiedades atribuidas a la unidad cultural denotada por la definición intencional que comúnmente se le aplica.
b) Connotaciones de las unidades semánticas que componen el significado.
c) Definiciones “ideológicas” lo que se entiende como ideología. Se consideran definiciones ideológicas las definiciones incompletas que ponen a prueba la unidad cultural o un complejo de unidades culturales bajo uno de sus posibles aspectos

Connotaciones emotivas el significado emotivo es un “significado en el que la reacción o el estimulo es una descarga de emoción”, se puede decir que al connotación emotiva es un hecho absolutamente idiosincrásico sobre el cual no tiene ninguna competencia el análisis semiótico.
e) Connotaciones de hiponimia, hiperonimia y antonimia. Aunque en cierto sentido pueden formar parte del significado definiciónal admitamos como casos particulares de connotación aquel en que connota la clase a al que pertenece mientras que por su parte connota propiedades específicas que no connota.
f) Connotaciones por traducción a otro sistema semiótico. Un lesema puede connotar su traducción a otra lengua.
g) Connotaciones por artificio retórico. La retórica nos ofrece esquemas para elaborar relaciones inesperadas.
h) Connotaciones teórico-estilísticas. Una cierta forma del mensaje puede connotar la corriente estilística a la que se atribuye o la visión ideológica que se sirve de esta forma para expresarse.
i) Connotaciones axiológicas globales. Una cadena de connotaciones puede asumir el destinatario valores positivos o negativos. Estas marcas axiológicas terminales, que son connotaciones finales de las connotaciones, están ligadas al problema de la ideología.
Esto muestra a la vez la importancia de cuales son los modos en que la pareja de un significante y de sus significado denotado (lo que Saussure llamaba el signo de su unidad) pueden referirse a otras unidades culturales que a su vez la cultura expresa por medio de otros signos.

El análisis tiene dos partes que lo conforman una visual y otra de mensaje, por ello hemos optado por plantear la subdivisión de funciones del lenguaje, propuesta por Jakobson:
a) referencial: el mensaje pretende denotar cosas reales
b) emotiva: el mensaje tiende a provocar reacciones emotivas
c) imperativa: el mensaje es una orden
d) de contacto, o fáctico: el mensaje finge la provocación de emociones, pero de hecho sólo pretende comprobar y confirmar el contacto entre dos interlocutores
e) metalingüística: el mensaje tiene por objeto a otro mensaje
f) estética: el mensaje reviste una función estética cuando se estructura de una manera ambigua y se presenta como autorreflexivo, es decir, cuando pretende atraer la atención del destinatario sobre la propia forma, en primer lugar.

[1] Este texto fue tomado de la revista Versión. Estudios de Comunicación y Política. No 1. Universidad Autónoma Metropolitana Xochimilco, México, Octubre de 1991. (Se le hicieron algunas modificaciones y adaptaciones al texto original

Escenario Espacio-temporales

La revista Proceso estuvo pensada hacerse en el año de 1976 en la Ciudad de México, a través de un conflicto que tuvieron algunos periodistas que fueron expulsados del periódico el Excélsior, aunque para ese entonces sólo se veía como un sueño guajiro por estos periodistas a los que les urgía trabajar y más que ganar dinero, les importaba ejercer su carrera.

Este conflicto de Excélsior es importante mencionarlo, pues se toma como uno de los antecedentes de Proceso, y por ello es relevante saber qué fue lo que pasó. Bueno, pues resulta que este pequeño problema periodístico es conocido como el "golpe a Excélsior" de 1976 y es considerado como un ataque a la libertad de expresión y a lo que entonces se lo podría llamar como el periodismo contemporáneo en México.

Cabe mencionar que el conflicto no se dio de la nada, sino que tuvo mucho que ver la mano del gobierno, o mejor dicho del propio Echeverría, quién se encontraba en ese momento a cargo de la presidencia de México, de hecho se dice que fue el quien prácticamente expulsó a Julio Scherer del Excélsior, porque tenían ciertos roces y conflictos, por lo que esto es un claro ejemplo de cómo el poder político puede amedrentar a periodistas y afectar por supuesto su trabajo.

Hasta el momento este conflicto no se ha logrado esclarecer, pues hay algunos investigadores que lo mencionan como una racha periodística en la historia de México, argumentando que no fue precisamente los problemas que tenían Luis Echeverría y Julio Scherer lo que ocasionó la salida de más periodistas, sino que el diario Excélsior se encontraba en una situación de conflictos económicos desde 1962.

Regresando al surgimiento de la revista, después de haber expuesto el problema anterior fue así, entre estar pensando el nombre de la revista y quiénes más la integrarían, como surgió la revista Proceso el 19 de julio de ese mismo año, el título fue una sugerencia de Enrique Maza. Los pioneros (por decirlo de alguna forma) fueron los periodistas Julio Scherer quien proponía información, Miguel Ángel Granados Chapa que se inclinada por respuesta y Vicente Leñero por la expresión, este último cuenta como experiencia que no le agradaba del todo el nombre que llevaría el nuevo medio, ya que a principio le parecía muy banal, pero después terminó aceptándolo.

El equipo fundador oficial de la revista se había definido desde el 19 de junio y quedó de la siguiente manera:
Director general de Proceso Julio Scherer García.
Director gerente Miguel Ángel Granados Chapa.
Editores Vicente Leñero y Miguel López Azuara.
Coordinadores María de Jesús García, Carlos Marín y Rafael Rodríguez Castañeda.
Su cuerpo de redacción estaba formado por reporteros salidos de Excélsior.
Aunque el primer número aparece el sábado 6 de noviembre de 1976. En un principio se tenía pensado que en la portada de este primer número apareciera la fotografía del presidente en turno Luis Echeverría, pero obviamente por los conflictos con Scherer, se decidió negar esta proposición. Por lo que no hubo más alternativa que por acuerdo de Granados Chapa, Scherer y Leñero, la portada sería de color blanca y destacaría lo de tres semanas.

El primero se titulaba “El sexenio: las palabras y los hechos”, una revisión exhaustiva del sexenio de Echeverría. El segundo apartado ofrecía un adelanto de las memorias de Daniel Cosío Villegas, colaborador del Excélsior de Scherer y cuya crítica precipitó la censura del gobierno federal. El tercer reportaje de portada, “Libre expresión: de Excélsior a Proceso”, daba su propia versión de los acontecimientos que propiciaron la creación del semanario. Esto estuvo bajo la supervisión del diseñador Alfonso Rodríguez Tovar, quien colaboró para la realización de la portada.

Primer Número de Proceso
Obviamente Proceso surge precisamente en un ambiente político no muy agradable con Luis Echeverría como presidente, quien trató de sabotear la revista y evitar que saliera en la fecha acordada, por lo que puso muchas piedritas en el camino, pues citó varias veces a Scherer en la Procuraduría General de la República para que hiciera algunas declaraciones, ya que se le asociaba con el fraude que se había cometido en Excélsior, pero logró salir librado de todo. Esto demuestra que aun cuando la revista no realizaba su primer tiraje ya había amenazas de censurarla por ataque político, perseguida por el espionaje y el sabotaje. Pero ese no fue un obstáculo para que el 6 de noviembre, saliera el primer número y se diera a conocer en el campo de la comunicación. Su precio inicial fue de diez pesos, tuvo mucho éxito en cuanto a ventas y se comenzó a publicar cada semana, todos los domingos como hasta ahora, sólo que actualmente cuesta 30 pesos.

Ya para el siguiente sexenio, que fue el de José López Portillo las aguas se comenzaban a calmar y por lo pronto Proceso se mantenía estable como un medio de comunicación y para el 6 de noviembre de 1977 se celebró el primer aniversario del semanario con nuevas instalaciones en la colonia Del Valle. Lo que no seguía igual era el equipo fundador ya que para entonces varios de sus elementos clave habían renunciado, como Granados Chapa quien salió el 27 de mayo de ese año.

Proceso llegó a su 30 aniversario el 6 de noviembre de 2006 con 1566 portadas y un directorio que incluye a algunos fundadores que ahora comparten la redacción con nuevas generaciones de periodistas. Por lo que estamos hablando de que actualmente tiene 31 años en circulación. Para Leñero y Scherer ha sido un avance considerable el que ha tenido la revista.

Por ello Leñero escribió: “En Proceso habíamos descubierto no sólo un nuevo camino sino una nueva forma de hacer un periodismo de verdad autónomo, libre, decía Julio Scherer”.

Así fue el comienzo de la revista proceso, un medio que se caracteriza por ser un semanario de información y análisis político, la revista cuenta con la sección Nacional, Estados, la Capital, Economía , Internacional, Cultura, Deportes y Espectáculos.

Actualmente su Consejo de Administración está conformado de la siguiente manera:
Presidente: Julio Scherer García
Vicepresidente: Vicente Leñero
Tesorero: Enrique Maza
Vocal: Enrique Sánchez España.

En cuanto al artículo que se va a analizar en este trabajo, lleva el título de “Hacia el spotgate”, publicado obviamente en la revista Proceso No. 1524 por Jenaro Villamil, el 20 de mayo del 2007.

El artículo “Hacia el spotgate”alude al gasto inmoderado en spots publicitarios para conseguir los votos de los ciudadanos, y muchos de los cuales no fueron declarados ante el IFE, tema que su periodicidad esta latente ya que el tema tiene aún mucho por ser investigado. El problema se centra en las elecciones presidenciales del año 2006.
Este reportaje está enfocado principalmente en el problema que se estaba llevando a cabo con la Reforma Electoral del 13 de abril del 2007, en cuanto a la agenda del gasto en publicidad de medios de comunicación por parte de los partidos políticos (PRI, PAN y PRD). Se trataba de descalificar tanto al monopolio Televisa como al Instituto Federal Electoral.

En esos meses el tema principal a tratar era precisamente el de los gastos de los partidos políticos en publicidad y su relación con las televisoras Televisa y TV Azteca, así como también se trataba de echar para atrás la ley Televisa, que se consideraba por la Suprema Corte de Justicia de la Nación una ley anticonstitucional.

Este es el escenario espacio-temporal en el que esta enfocado prácticamente el artículo que se analizará en este trabajo.

Campos de interacción

Tomando la definición de Pierce Bordieu en la cual define al campo de interacción como espacio de posiciones y conjunto de trayectorias que determinan algunas de las relaciones que se dan entre los individuos y algunas de las oportunidades que tienen a su disposición, sabemos que todos estos factores ubican a las expresiones simbólicas en cierto campo. Para identificar el campo al cual pertenece la expresión simbólica la cual se analizará, se optó por identificar instituciones, personas al igual que posiciones y trayectorias, agentes o habitus que por ser distintos y particulares en cada campo de interacción nos ayudara a ubicar al campo al cual pertenece está expresión simbolica que se extrajo de la Revista Proceso.

Cabe aclarar que estos términos serán utilizados según el criterio de Pierce Boirdieu sobre los campos de interacción. En principio comenzaremos por explicar que habitus es un sistema de disposiciones para actuar, sentir y pensar de una determinada manera, interiorizada e incorporadas por los individuos en el trascurso de su historia. El habitus se manifiesta fundamentalmente por medio del sentido práctico que es la aptitud para moverse, para actuar y para orientarse según la posición que se ocupe en el espacio social.

Por otra parte otro concepto importante para retomar es el capital social es un capital común a todos los campos en todos ellos los agentes pueden movilizar este tipo de capital. Es el conjunto de recursos actuales o potenciales relacionado con ls posesión de una “red duradera de conocimientos” más o menos institucionalizados. Es decir, la pertenencia a un grupo conlleva no sólo un conjunto de caracteres comunes, sino la unión por toda una serie de relaciones permanentes y útiles.

El volumen del capital social que cada agente posee depende de la cantidad de conocimientos que pueda movilizar en un momento determinado y de la cantidad de otro capitales (económico, cultural o simbólico) movilizados en beneficio de los que están con él relacionados. Lo cual significa que, aunque sea algo distinto del capital económico cultural que un determinado agente pueda poseer, el capital social jamás es completamente independiente de ellos, por el hecho de que los intercambios que institucionalizan el reconocimiento mutuo suponen el reconocimiento de un mínimo de homogeneidad objetiva y porque ejercen un efecto multiplicador sobre el capital poseído como propio. Por consiguiente el capital social aunque independiente y distinto, ejerce un papel potenciador sobre todos los otros capitales que cada agente social posee en los posibles campos en los que se encuentre ubicado.

Por otra parte ahondando en lo que es para este autor el campo para este el campo es una red de relaciones objetivas entre posiciones objetivamente (definidas en su existencia y en las determinaciones que ellas imponen a sus ocupantes) por su situación (situs) actual y potencial en la estructura de las distribuciones de las especies de capital (o de poder) cuya posición impone la obtención de beneficios específicos puestos en juego en el campo y a la vez por su relación objetiva con las otras posiciones.

El campo se constituye por:
1. La existencia de un capital común (conocimientos, habilidades, poder, etc.)
2. La lucha por su apropiación
3. y una jerarquización entre quienes detentan el capital y aquellos que aspiran a tenerlo.
Los campos son las distintas configuraciones de clases o relaciones sociales, donde se unen para relacionarse. Bordieu lo explicaba como si fuera una red, donde las relaciones son necesarias. Estas relaciones con su respectiva razón de ser y también con su estatus sociales que los hace relacionarse de tal o tal manera. Para Bordiue los las posiciones de los individuos funcionan con parejas de oposiciones.

Teniendo el contexto en cual ubicaremos a los agentes daremos paso a realizar este análisis. En principio se mencionará que el habitus sería la trayectoria del agente, en este caso nuestro agente es Proceso y su trayectoria muestra que es una revista de izquierda tendencia que define su actuar y pensar como me dio de comunicación masiva, además que en principio su trayectoria muestra que siempre ha sido una revista que escribe sobre política y con una línea como ya se dijo izquierdista.

Ahora con respecto al capital la revista proceso juega con capital simbólico y político debido a su línea editorial. Siendo así que dentro de lo que son sus artículos el capital simbólico es visible en principio porque es un producto de un medio masivo de comunicación y en segunda porque se pretende llegar al lector con ideas por medio de la palabra para cambiar su percepción. En este caso la revista Proceso lo que tiene en juego en cada una de sus publicaciones es el capital simbólico que a la vez afecta al político por medio de las percepciones o aceptaciones que esta publique con respecto a un cierto acontecimiento político.

Por otra parte vale la pena mencionar que dentro de está interacción social se encuentran implicadas instituciones políticas, y medios de comunicación, PAN, PRI, PRD, PVEM, Televisa, TV Azteca, es decir, esto aunado a la línea de la revista, todo se relaciona con el plano político. Y todo en torno a percepciones y creaciones de una realidad desde el punto de vista de la izquierda.

Siendo así que la forma simbólica la cual se analiza en este presente trabajo pertenece al campo político-simbólico, ya que involucra a instituciones políticas, así como una línea editorial donde se hace una valoración de hechos sociales desde el punto de vista político, por otra parte el capital es de tipo simbólico y político. Además que tratándose de la revista Proceso el campo político se intensifica en sus discursos que extrapolan a la “derecha” y a la “izquierda”. Haciéndose así dependiente el campo político con el capital simbólico (reproducción de una visión política-social de la realidad) que produce el periodismo por medio de la revista Proceso.

Institución Social

México DF a 4 de Diciembre de 2007.

¡Hola!. Tal vez te preguntaras porque escribo esta carta, pero tú tienes la respuesta. Sé que leíste un artículo de la revista Proceso y que desde entonces te has preguntado sobre su origen de ésta. No se si te parezca bien, pero decidí contarte la historia del nacimiento de esta publicación que yo conozco.

Era un domingo cuando, hace aproximadamente 90 años, Excélsior nació. Innumerables fueron los contratiempos técnicos y económicos que enfrentó el diario desde su gestación y que estuvieron a punto de obligar su muerte prematura. Pero la fortuna y el empeño jugaron en su favor y el 18 de marzo de 1917, a la una de la tarde, comenzó a circular en la Ciudad de México, a un precio de cinco centavos por ejemplar. Sus primeras palabras fueron “Al comenzar”: “...La Prensa esta destinada a ser la forjadora y la alentadora de los espíritus en estas experiencias de la vida Patria; la orientadora y la vivificadora, al mismo tiempo que la voceadora de la opinión publica...
Eran tiempos de turbulencia política. En el país, los humores de la Revolución aún se respiraban y las carencias económicas no hacían fácil el crecimiento de la empresa de un diario. Mucho menos de las dimensiones que pretendía para Excélsior su padre, Rafael Alducin.
En su imaginación no sólo se concibió un primogénito, sino un complejo editorial que ofreciera diversas publicaciones y aprovechara recursos como la radio, para ampliar su oferta informativa y de entretenimiento.
Alducin concibió a Excélsior cuando tenía apenas 28 años. Para entonces ya era padre de dos hijos más: El automóvil de México (1915) y Revista de revistas (1910). Pero un primogénito era su anhelo. De modo que para familiarizarse con la operación de un diario y conocer las nuevas técnicas de comercialización, viajó varias veces a Estados Unidos.

Ahí se inspiró en The New York Times, del cual tomó el diseño y el concepto de "las ocho columnas". El nombre elegido fue Excélsior, que significa "lo más alto". En sus primeros cinco años de vida, enfrentó condiciones económicas adversas. No había dinero ni para la nómina. A pesar de ello, el diario fue ambicioso y comenzó a dar la batalla en el terreno de la promoción. Concursos de nacimientos, fotografías familiares, reinas de la belleza, entre otros, pegaron en el ánimo de los lectores. Pero el triunfo más contundente lo obtuvo al inaugurar, por convocatoria propia, el 10 de mayo como el Día de las Madres.

Excélsior crecía como un niño normal, con muchos triunfos y con la admiración de mucha gente; sin embargo, cuando este primogénito disfrutaba de sus mejores años de vida, Alducin falleció y la suerte de Excélsior se quebró. A punto estuvo de desaparecer si no hubiera sido por los trabajadores, que convencieron a Plutarco Elías Calles de convertir el diario en cooperativa.
Casi en la ruina, tuvo que remontar camino y lo hizo a partir de 1934, bajo la tutoría de Rodrigo de Llano. Nuevas ediciones, más reporteros, mejor maquinaria y una política de adquisición de bienes inmuebles apuntalaron la salud financiera del periódico.

Para 1940 Excélsior publicaba, además del matutino, dos ediciones vespertinas: Últimas Noticias (1936) y la segunda edición de Últimas Noticias (1939), conocida como la Extra. A la muerte de Rodrigo de Llano, en 1964, Excélsior se había consolidado como El Periódico de la Vida Nacional. Al relevo llegó Manuel Becerra Acosta, quien sólo duró cuatro años al frente del periódico.

Al fallecer el viejo maestro y fundador, Julio Scherer García ocupó su lugar, durante una de las etapas más vitales del diario. Renovado en su página editorial, que contaba con las plumas más destacadas de su momento, y ambicioso en su oferta informativa, el periódico introdujo novedosos cambios en la manera de hacer periodismo.

Excélsior, que desde su nacimiento en 1917 se había caracterizado por su postura conservadora, empezó a variar ideológicamente a partir de la muerte de don Rodrigo de Llano, su director por muchos años, tras la gestión de don Manuel Bacerra Acosta (1963- 1968) se radicalizó bajo Julio Sherer García, cuyo grupo se hizo firmemente del control de la cooperativa.

Se acercaba el final del sexenio del presidente Luis Echeverría y el nombre de la nueva revista que reagruparía a los periodistas expulsados de Excélsior, el 8 de julio de 1976, continuaba sin decidirse. Julio Scherer proponía Información, Miguel Ángel Granados Chapa se inclinada por Respuesta y Vicente Leñero optaba por Expresión. Proceso fue sugerencia de Enrique Maza. Así lo recuerda Leñero en su novela testimonial Los periodistas (1978).

Proceso daba sus primeros pasos el sábado 6 de noviembre de 1976. El logo original fue diseñado por Alfonso Rodríguez Tovar. Y aunque en un principio se pensó en una foto ampliada de Echeverría (que habría implicado un proceso simbólico al presidente), Scherer, Granados Chapa y Leñero acordaron una portada blanca que destacaba tres temas. El primero se titulaba “El sexenio: las palabras y los hechos”, una revisión exhaustiva del sexenio exangüe de Echeverría. El segundo apartado ofrecía un adelanto de las memorias de Daniel Cosío Villegas, colaborador del Excélsior de Scherer y cuya crítica acérrima precipitó la censura del gobierno federal. El tercer reportaje de portada, “Libre expresión: de Excélsior a Proceso”, daba su propia versión de los acontecimientos que propiciaron la creación del semanario.

Correctamente presentada técnicamente y periodísticamente, la revista Proceso ha sido partidaria desde su nacimiento desde la tesis de izquierda; es crítica aguda de la economía de mercado y del discurso oficial, sin que en este último caso importe mayormente quienes hayan detentado el poder o lo detentaran actualmente.

Rasgo característico de la crisis económica que empezó a sacudir el país a partir de la década de los setentas, fue la aparición en prácticamente todos los diarios y revistas de secciones especializadas en asuntos económicos y financieros. Boicots de publicidad, conflictos internos, intervenciones externas y enfrentamientos con el gobierno de Luis Echeverría tejieron la historia del episodio que se conoce como el golpe a Excélsior. Luego, los claroscuros envolvieron al diario. Sin embargo, mantuvo lectores fieles y una posición destacada en la prensa durante los siguientes años.

El golpe a Excélsior es sin duda el evento catalizador que inauguró la abierta confrontación entre el poder y un creciente reclamo de libertad de expresión. Pero el trayecto del golpe del 8 de julio al nacimiento del semanario el 6 de noviembre fue largo y complejo. Una fecha clave entre estos dos hitos decidió la suerte del grupo de periodistas y preparó el terreno para el nacimiento de Proceso: el 19 de julio de 1976. Esa tarde, apenas 10 días después del golpe a Excelsiór, Granados Chapa leería un discurso en el Hotel María Isabel para anunciar y poner a la venta acciones de dos nuevos proyectos: una agencia de noticias, “Comunicación e Información, S.A. de C.V.” (CISA) y una revista semanal, aún sin nombre, pero con un claro objetivo periodístico.

El equipo fundador de la revista se definió con claridad ese 19 de junio: Era director general de Proceso Julio Scherer García; director gerente Miguel Ángel Granados Chapa; editores Vicente Leñero y Miguel López Azuara; coordinadores María de Jesús García, Carlos Marín y Rafael Rodríguez Castañeda. Su cuerpo de redacción estaba formado por reporteros salidos de Excélsior.

Todo estaba listo para lo que fue el nacimiento de Proceso, sin embargo, su inicio se veía afectado. Amenazada directa e indirectamente, perseguida por el espionaje y el sabotaje, Proceso se abrió paso entre medios de comunicación y empresas que hacían comparsa a la campaña emprendida por el gobierno de Echeverría contra Excélsior y que se extendió contra la revista. La Productora e Importadora de Papel S.A. de C.V. (PIPSA) ignoró la solicitud del material esencial para la impresión del primer número. El secretario de Patrimonio Nacional, Francisco Javier Alejo, pidió a Scherer aplazar la primera edición programada para el 6 de noviembre.

Desde su origen, Proceso fue vigilada. El 3 de noviembre de 1976, el subsecretario de gobernación, Fernando Gutiérrez Barrios, recibió el siguiente memorando de la Dirección General de Seguridad: “La revista ‘Proceso’ saldrá a la luz pública el próximo día 6 del presente mes y es dirigida por Julio Scherer García. Dicha revista saldrá semanalmente” .

Así, el 6 de noviembre, pese a las amenazas y con más de 12 diarios del interior del país publicando desde agosto noticias de la nueva agencia CISA, circularon los 100 mil ejemplares del primer número de Proceso. El 6 de noviembre de 1977 se celebró el primer aniversario del semanario ya con las nuevas oficinas de Fresas 13, en la colonia Del Valle, en plena funcionalidad. El equipo fundador había comenzado a transformarse con la salida varios de sus elementos clave, como lo fue la renuncia de Granados Chapa el 27 de mayo de ese año. A pesar de ello, sobraban razones para celebrar.

Proceso llegó a su 30 aniversario el 6 de noviembre de 2006 con 1566 portadas y un directorio que incluye a algunos fundadores que ahora comparten la redacción con nuevas generaciones de periodistas. Corresponde al lector definir el balance de aciertos y errores de Proceso. En el trayecto de tres décadas, desde el interior de su redacción, Proceso mantiene la mirada fija en el presente, y consigna: “Así somos y aquí estamos”. También en el 2006 Proceso publica un artículo titulado “Hacia el spotgate”; un reportaje que nace para demostrar que en las últimas elecciones presidenciales de 2006, hubo un gasto inmoderado en spots publicitarios para conseguir los votos de los ciudadanos, y muchos de los cuales no fueron declarados ante el IFE. Además se relacionaba el tema de la Ley Televisa y de la Reforma Electoral.

También en 2006, la cooperativa decidió la venta de Excélsior y éste entró a una nueva etapa. Hoy el diario ha vuelto la vista a su origen y retomado el ambicioso proyecto de su padre, al apostar por un proyecto periodístico multimedios, que suma los recursos de la prensa, la radio, la televisión y la Internet para un mismo propósito informativo.

Es así como nace Proceso, una revista fuerte y firme, un semanario de información de análisis, una publicación donde sus colaboradores sostienen un compromiso con su tiempo y con su país; quienes buscan el origen de los hechos y ejecutan un proceso a las acciones y a sus protagonistas.

Proceso de los hechos, proceso a los hechos y a sus protagonistas, estas son las líneas de acción de nuestro semanario. Golpeados por la inquina política en términos que causaron asombro dentro y fuera de México, por la impudicia de la agresión y la relevancia de quienes la concibieron, sus miembros no harán de Proceso un semanario del despecho y el resentimiento. Primero, porque comprenden la naturaleza política de los hechos en que se les ha involucrado. Y en segundo lugar, y sobre todo, porque los conforta y obliga la solidaria generosidad de un vasto número de mexicanos decididos a que el silencio no cubra por completo a esta nación (Leñero, 1978, p. 288).

Granados Chapa explicó durante el nacimiento de Proceso que “así, sobre la base de mayor autonomía y mayor compromiso, en lo que es una paradoja sólo aparente, este grupo de periodistas y escritores, de ciudadanos libres preocupados por mantener y ampliar un foro de expresión democrática, plural, responsable, se apresta a defender nuevamente no su propio derecho a la palabra y ni siquiera el más elemental de sobrevivir ejerciendo la vocación que les ha ganado, sino el derecho de los mexicanos a la información y al análisis veraz, crítico e independiente” (Leñero, 1978, p. 288).

Esta es la historia, es la historia de Excélsior, es la historia de Proceso, es la historia de Vicente Leñero y es mi historia. Soy Julio Scherer García y espero que esta información te sirva y te sea de gran utilidad. Quizá te quedarán dudas pero confió en que sean muy pocas. Si deseas puedes buscarme, tú sabes en donde encontrarme y no olvides que cada semana yo estoy contigo y Proceso igual.

¡Hasta Siempre!

Estructura Social

La estructura social es un conjunto de asimetrías, diferencias y divisiones de una sociedad. Para su análisis se requiere proponer criterios y formular categorías.
La sociedad esta dividida en clases. Esto es una estructura social. En esta parte por lo tanto se pretende contemplar como era la estructura social de la revista Proceso en 1976 año en el que se creo dicha revista y así mismo hay que estudiar como ha ido cambiando, como ha ido evolucionando su estructura al paso del tiempo. También hay que ver a que tipo de público se dirige dicha forma simbólica.

La historia de la revista comienza en la década de los 70 así que se expondrá a continuación el panorama mas relevante sobre la política y sociedad mexicana que rodeaba a la revista Proceso.
Al principio de la década el 10 de junio de 1971, tuvo lugar una manifestación estudiantil en la Ciudad de México en apoyo a los estudiantes de Monterrey. Estos fueron recibidos por un grupo paramilitar al servicio del estado llamado "Los Halcones". El presidente se desligó de los hechos y pidió la renuncia del Jefe del Departamento del Distrito Federal. Estos hechos se conocieron con el nombre de El halconazo o la matanza del Corpus Christi.

Regresando un poco en 1970, Luis Echeverría Álvarez, anterior secretario de Gobernación, alcanzaba la presidencia. Durante su sexenio se llevó a cabo el crecimiento económico de forma más equilibrada, de manera que todos los niveles de la sociedad mexicana se beneficiaran; Echeverría adoptó medidas para reducir la influencia extranjera en la economía e incrementar las exportaciones. Redujo los lazos con Estados Unidos y en su lugar negoció acuerdos económicos con varias naciones de América Latina, Canadá y la Comunidad Europea (actualmente Unión Europea). Del mismo modo, negoció un acuerdo con el Consejo para la Ayuda Mutua Económica patrocinado por la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). La economía mexicana creció a un saludable ritmo anual del 6,3% durante el periodo de 1970 a 1974, pero ya en 1975 la tasa de crecimiento económico disminuyó marcadamente y la inflación aumentó de manera sustancial. En un intento por reducir el déficit comercial extranjero, el gobierno devaluó el peso en 1976 en más del 50%, estableciendo una tasa cambiaria flotante. Un hecho potencialmente beneficioso para la economía del país tuvo lugar en 1974 y 1975: el descubrimiento de extensos yacimientos de petróleo crudo en los estados de Campeche, Chiapas, Tabasco y Veracruz. Además, a finales de 1976 Echeverría decretó que unas 100.000 hectáreas de las mejores tierras agrícolas de los estados de Sonora y Sinaloa serían expropiadas mediante el pago de indemnizaciones.

Como se puede observar se estaban dando cambios favorables a pesar de la inestable economía la sociedad se encontraba en un aparente equilibrio, en un aparente bien estar. Pero por otro lado el gobierno hacia de las suyas ocultando información y devaluando día a día el valor del peso mexicano.

José López Portillo, candidato por el PRI, fue elegido presidente en 1976. Había sido, entre otros cargos, secretario de Hacienda y Crédito Público, por lo que llevó a cabo un programa de austeridad económica después de la toma de poder en diciembre; llamó a los trabajadores a reducir las demandas de salarios y a los empresarios a mantener los precios y a incrementar los gastos de inversión. Los siguientes años se registró una mejora considerable de la economía, a pesar de que la inflación se mantenía alta. En política exterior, López Portillo intensificó los lazos con Estados Unidos en 1977 y restableció las relaciones diplomáticas con España, interrumpidas durante 38 años.

La producción de petróleo aumentó al doble durante la segunda mitad de la década de 1970, lo que, combinado con un considerable aumento de su precio, proporcionó a México una independencia más significativa, especialmente en las relaciones con Estados Unidos. Sin embargo, la baja de los precios del petróleo terminó con los planes de crecimiento, limitándose su producción y exportación. Al término de su mandato, López Portillo impuso la nacionalización de la banca y el control monetario.

En los años previos y posteriores a la crisis de 1976 el empleo, el valor de la moneda, la migración del campo a las ciudades y a los Estados Unidos de Norteamérica, el monto del salario y el costo de la canasta básica, presentaron variaciones que van en perjuicio de la clase trabajadora. Con la crisis económica de los años ochentas la situación social fue más preocupante, pues aún la sociedad no se recuperaba de la crisis anterior, por lo que se originó una pauperización de de los grupos más marginados al mismo tiempo que la riqueza se concentra en pocas manos. Esta situación desencadenó un aumento en los índices delictivos, por lo que a partir de este momento, las autoridades comienzan a plantear a las crisis económicas como un factor criminógeno.

Por lo tanto aquí se puede apreciar que Proceso va a surgir en un año de crisis económica, en una sociedad totalmente desequilibrada, dispareja pues la riqueza se concentraba en varias manos y los proletarios, los pobres que eran la gran mayoría día a
día les abrían las venas “los de arriba” y los asesinaban lentamente bombardeándolos con una y otra crisis económica, en este ambiente surge Proceso con la finalidad de investigar, de desenmascarar y de informar a intelectuales, para que estos pudiesen esparcir este conocimiento en las clases mas desfavorecidas y se tuviera un despertar social un desentumimiento de la mente, una puerta a la verdad, sobre lo que estaba pasando en el país.

Tal situación motivó, entre otras cosas, que el salario no sufriera incrementos en los últimos meses, generando declaraciones de huelga en las que se exigía principalmente el incremento salarial. Frente a estos movimientos, la clase empresarial mexicana señalaba que la huelga, era factor que contraía la producción y que promovía la violencia "provocada por grupos sindicales que, llamándose independientes pretenden provocar un desquiciamiento económico general" (El informador, Sábado 14 de agosto 1976, año LIX, t. CCXXVIII, núm. 21,012 p. 1)

Por otro lado tratando con profundidad el sistema político y social, tenemos lo siguiente:
El sistema político y partidista naufraga en la corrupción y el cinismo. La democracia propiciada por los “mercaderes” es “todos contra todos”, sin importar la nación y el pueblo, lo único que importa es el poder por el poder mismo.
El Estado se encoge y se reduce a funciones de policía y administrador y el Mercado se ensancha y toma la dirección de la sociedad y del país.

l sistema social esta totalmente deshumanizado y esta embrutecido. Los valores y principios de nuestra civilización están siendo diluidos lenta pero incesantemente. La familia cada vez pierde sus tradiciones, valores y costumbres. Los adultos están perdidos en la necesidad, cada vez más apremiante y difícil de conseguir dinero para tratar de vivir una vida de consumo-chatarra y buscar la ilusión de la evasión. Nuestra niñez y juventud encuentra en la televisión y en el consumismo su razón existencial y en la violencia y las drogas una puerta falsa para escapar de la miseria existencial que les ofrecemos los adultos. Con una pésima educación académica colonizada, con una sociedad corrupta y enajenada, sin fuentes dignas de empleo, sin alternativas, sin futuro, sin alternativas espirituales. Embrutecidos, explotados, tratados injusta, insensible y violentamente, así crecen los jóvenes, con paradigmas comerciales en la farándula y el deporte comercial, como hijos de “Chavelo y de Gloria Trevi”... adoradores del becerro de oro. Individualizados, agresivos, temerosos, violentos e inseguros.

En esa estructura política se encontraba la sociedad mexicana, en este contexto. Y en este contexto fue que se desarrollo dicha revista en medio de un gran desastre político y económico, en medio de una gran opresión, de una gran represión, así surge la revista casi a final del sexenio del presidente Luis Echeverría y el nombre de la nueva revista que reagruparía a los periodistas expulsados de Excélsior el 8 de julio de 1976 continuaba sin decidirse. Julio Scherer proponía Información, Miguel Ángel Granados Chapa se inclinada por Respuesta y Vicente Leñero optaba por Expresión. Proceso fue sugerencia de Enrique Maza. Así lo recuerda Leñero en su novela testimonial Los periodistas (1978)

El primer número apareció el sábado 6 de noviembre de 1976. Y aunque en un principio se pensó en una foto ampliada de Echeverría (que habría implicado un proceso simbólico al presidente), Scherer, Granados, Chapa y Leñero acordaron una portada blanca que destacaba tres temas. El primero se titulaba “El sexenio: las palabras y los hechos”, una revisión exhaustiva del sexenio exangüe de Echeverría. El segundo apartado ofrecía un adelanto de las memorias de Daniel Cosío Villegas, colaborador del Excélsior de Scherer y cuya crítica precipitó la censura del gobierno federal. El tercer reportaje de portada, “Libre expresión: de Excélsior a Proceso”, daba su propia versión de los acontecimientos que propiciaron la creación del semanario.

Golpeados por la inquina política en términos que causaron asombro dentro y fuera de México, por la impudicia de la agresión y la relevancia de quienes la concibieron, sus miembros no harán de Proceso un semanario del despecho y el resentimiento. Primero, porque comprenden la naturaleza política de los hechos en que se les ha involucrado. Y en segundo lugar, y sobre todo, porque los conforta y obliga la solidaria generosidad de un vasto número de mexicanos decididos a que el silencio no cubra por completo a esta nación.

El golpe a Excélsior es sin duda el evento catalizador que inauguró la abierta confrontación entre el poder y un creciente reclamo de libertad de expresión. Pero el trayecto del golpe del 8 de julio al nacimiento del semanario el 6 de noviembre fue largo y complejo. Una fecha clave entre estos dos hitos decidió la suerte del grupo de periodistas y preparó el terreno para el nacimiento de Proceso: el 19 de julio de 1976.
Apenas 10 días después del golpe a Excélsior, Granados Chapa leería un discurso en el Hotel María Isabel para anunciar y poner a la venta acciones de dos nuevos proyectos: una agencia de noticias, “Comunicación e Información, S.A. de C.V.” (CISA) y una revista semanal, aún sin nombre, pero con un claro objetivo periodístico.

En su discurso ante más de dos mil personas, Granados Chapa anunció la creación de “un gran semanario de información, interpretación y análisis, en fórmula inexistente hasta ahora en nuestro país”.

El objetivo era expresar que este grupo de periodistas y escritores, de ciudadanos libres preocupados por mantener y ampliar un foro de expresión democrática, plural, responsable, se apresta a defender nuevamente no su propio derecho a la palabra y ni siquiera el más elemental de sobrevivir ejerciendo la vocación que les ha ganado, sino el derecho de los mexicanos a la información y al análisis veraz, crítico e independiente.

El equipo fundador de la revista se definió con claridad ese 19 de junio: Era director general de Proceso Julio Scherer García; director gerente Miguel Ángel Granados Chapa; editores Vicente Leñero y Miguel López Azuara; coordinadores María de Jesús García, Carlos Marín y Rafael Rodríguez Castañeda. Su cuerpo de redacción estaba formado por reporteros salidos de Excélsior.

Amenazada directa e indirectamente, perseguida por el espionaje y el sabotaje, Proceso se abrió paso entre medios de comunicación y empresas que hacían comparsa a la campaña emprendida por el gobierno de Echeverría contra Excélsior y que se extendió contra la revista. La Productora e Importadora de Papel S.A. de C.V. (PIPSA) ignoró la solicitud del material esencial para la impresión del primer número. El secretario de Patrimonio Nacional, Francisco Javier Alejo, pidió a Scherer aplazar la primera edición programada para el 6 de noviembre. El argumento, recuerda Leñero, no carecía de sutileza: “la desaparición de quince personas no afectaría la tranquilidad del país; su pérdida no era comparable a lo que significaba la seguridad del Estado”. El subsecretario de la presidencia, Fausto Zapata, fue un poco más coloquial, según el recuento de Ricardo Garibay: “Partidera general de madres va a haber si continuamos creyendo que podemos insultar así como así al presidente de la República”.

El 22 de octubre, la Procuraduría del Distrito Federal citó a comparecer a Scherer en dos ocasiones en respuesta a una denuncia interpuesta por Excélsior que lo vinculaba con un supuesto fraude millonario. Más allá de la oportunidad mediática en contra del prestigio del ahora director de Proceso, ningún periódico capitalino dio espacio a la respuesta de Scherer.

Muchos años después, Julio Scherer habría de documentar en el Archivo General de la Nación la vigilancia a la que fue sometida Proceso por los servicios de inteligencia del país ante la expectativa de su primer número. En su libro Los patriotas. De Tlatelolco a la guerra sucia, anota Scherer:

Desde su origen, Proceso fue vigilado. El 3 de noviembre de 1976, el subsecretario de gobernación, Fernando Gutiérrez Barrios, recibió el siguiente memorando de la Dirección General de Seguridad: “La revista ‘Proceso’ saldrá a la luz pública el próximo día 6 del presente mes y es dirigida por Julio Scherer García. Dicha revista saldrá semanalmente”.
El 6 de noviembre, pese a las amenazas y con más de 12 diarios del interior del país publicando desde agosto noticias de la nueva agencia CISA, circularon los 100 mil ejemplares del primer número de Proceso. Escribe Leñero: Era un éxito. Nos felicitaban.

Para el sexenio del presidente José López Portillo, Proceso se había establecido como la gran revista de oposición, escribe Carlos Monsiváis, “donde los reportajes de investigación neutralizan el clamor adulatorio o, por lo menos, diseminan las dudas y estimulan la indignación”.

El 6 de noviembre de 1977 se celebró el primer aniversario del semanario ya con las nuevas oficinas de Fresas 13, en la colonia Del Valle, en plena funcionalidad. El equipo fundador había comenzado a transformarse con la salida varios de sus elementos clave, como lo fue la renuncia de Granados Chapa el 27 de mayo de ese año. A pesar de ello, sobraban razones para celebrar. Escribe Leñero al final de su novela Los periodistas: “En Proceso habíamos descubierto no sólo un nuevo camino sino una nueva forma de hacer un periodismo de verdad autónomo, libre, decía Julio Scherer”.

Proceso llegó a su 30 aniversario el 6 de noviembre de 2006 con 1566 portadas y un directorio que incluye a algunos fundadores que ahora comparten la redacción con nuevas generaciones de periodistas. Corresponde al lector definir el balance de aciertos y errores de Proceso. En el trayecto de tres décadas, desde el interior de su redacción, Proceso mantiene la mirada fija en el presente, y consigna: “Así somos y aquí estamos”.

Finalmente a grandes rasgos se puede observar con que obstáculos se ha venido desarrollando dicha revista, los impedimentos políticos, las circunstancias sociales, con todos estos elementos la revista Proceso, un medio de comunicación masiva cumplió el año pasado 30 años de estar en circulación, dirigiéndose a un publico intelectual, a un publico critico, de mente abierta y con capacidad de opinión, los estudiantes, los profesores y en general todos los profesionistas son candidatos predilectos para la lectura de esta revista semanal que le tira duro y directo a la política, sin olvidar que tiene inclinación izquierdista, esta revista es de los pocos medios escritos en México que emite criticas en contra del gobierno, y que tiene líneas de investigación mas extensas que otros medios además de ser, también de las pocas que abordan una investigación sobre narcotráfico. Esto es finalmente, la estructura de Proceso.

Medios Tecnicos de Transmisión

En este apartado corresponde explicar el por qué la revista Proceso es un medio de comunicación o mejor dicho un medio técnico de transmisión, para poder llevar a cabo esto fue necesario tomar como referencia a Marshall McLuhan. Como se sabe hasta hoy un medio de comunicación nos informa, entretiene, divierte, nos muestra la realidad de lo que sucede a nuestro alrededor, pero también trata de enfocarse en muchas ocasiones sólo en una parte de la sociedad, por lo que aquello se vuelve en una realidad a medias, ya que muchos sólo muestran a la gente lo que quieren ver a su conveniencia. Por ello es que no todos los medios son objetivos, de hecho ninguno lleva una objetividad, porque se inclinan siempre por un sector político en muchos casos.

Para Marshall McLuhan un medio que no produce nada, es decir que no tiene un mensaje para transmitir, es un medio sin mensaje y por lo tanto sin contenido, a menos de que se use para presentar algo. Hablando en ese sentido entonces, no se puede considerar un medio y mucho menos algo comunicativo lo que no nos informa, sin embargo hasta hoy creemos que todo lo que nos muestran es información verídica.

En el caso de la revista Proceso se habla sí, de un medio de comunicación escrito, en donde nos muestran información política a nivel nacional e internacional, deportes, cultura y espectáculos, economía y deportes. Sin embargo a pesar de que la revista cuenta con estas secciones está más enfocada en términos políticos y económicos, a mostrar qué es lo que ocurre en aspectos de política, que involucrarse en el medio del espectáculo o los deportes. Por ello es que lleva como lema “Semanario de información y análisis político”.

Sin embargo no por el hecho de que Proceso esté enfocado en la política y en el análisis, no quiere decir que siempre nos muestre la realidad de los hechos, pues al leerla uno se puede dar cuenta que llega a tener preferencias izquierdistas, pues en algunos análisis se percibe cierta crítica hacia los sectores de derecha como el PAN, por lo tanto su análisis estará enfocado la mayoría de veces sólo a criticar a algunos y tratar bien a otros, por ello hay ocasiones en las que muchos lectores se enajenan con lo que leen y piensan que es el único medio que está diciendo la “verdad”, aunque se sabe de antemano que no es cierto, aquí cabría citar a McLuhan cuando dice que el contenido nos ciega, por lo tanto la revista Proceso aquí cumple con una de las funciones de los medios de comunicación que es informar, entretener y persuadir.

Informar en el aspecto en que se da a conocer lo que acontece en la sociedad, sea verídica, objetiva o no la información dada. Entretener por ejemplo en el caso de la sección de espectáculos y deportes, aunque aquí hay que señalar que esta revista no se enfoca en la sección de espectáculos tanto en chismes, dimes y diretes como lo harían otras revistas como TV Notas y TV y Novelas que a eso se dedican, no, en el caso de Proceso muestra reportajes acerca de algo importante que han hecho los famosos, quizá la trayectoria artística de alguien, pero no que si fulanito le dijo al otro algo, que si ya Niurka se voltio a casar, pues esto no es parte del material con el que trabaja esta revista.

En el caso de la persuasión, es como cualquier medio de comunicación, a pesar de que sea chafa o muy enriquecedora la información todos logran persuadir a cierto sector de la sociedad, depende del interés que tenga cada lector, porque a alguien no le va a interesar a lo mejor los problemas que tenga el PAN o el PRI al interior de su partido, si lo que le agrada más es leer la sección de espectáculos, o en el caso de la sección de Economía, no va a lograr jalar la atención de alguien a quien sólo le interesa como quedaron los Pumas en el marcador del partido de la semana. De eso se trata la persuasión, no a todos les interesa leer toda una revista, sino que muchas veces sólo lo que es del gusto de cada quien.

Por ello es que Proceso tiene para el gusto de todos, por las secciones que contiene, junto con la información y ya de ahí a ver quien se deja persuadir y convencer por el contenido que nos muestra esta revista, por ello es que se dice que cualquier medio tiene el poder de imponer, dependiendo de su contenido. Para McLuhan el poder de un medio escrito como en el caso de Proceso, es el de la escritura, pues es a través de esta como se va a plasmar el habla del ser humano. Sin lugar a dudas, la prensa es como la voz del hombre.

Entrando a aspectos técnicos de la revista y a la forma en que organiza su información a lo largo de sus paginas, si hay algo que destacar en Proceso es que toda su información se encuentra acompañada por fotografías, sin embargo sería importante mencionar que siempre es la misma portada, pues sólo muestran la fotografía de un sólo reportaje que va a venir dentro de sus paginas, en ese aspecto la portada si es muy lineal, y si se analiza y compara, desde el primer numero que apareció en 1976 hasta el 2007 la portada sigue teniendo el mismo formato, en ese aspecto si es muy obsoleta.

La imágenes y el texto hacen un complemento para que la información ante los ojos del lector sea más atractiva, además al abrir una revista y ver el contenido en cuanto a imágenes, inmediatamente se crea una idea de lo que va a tratar, esa es la ventaja de los medios escritos, que se puede leer información y complementarla con fotografías.

En este caso es importante señalar que hay dos tipos de medios que menciona McLuhan, por un lado están los calidos y por otro los fríos. Los medios cálidos son aquellos que nos proporcionan información y los fríos son los que dan media información. Si tratamos de situar a los medios escritos, en este caso la revista Proceso en una de estas dos categorías, se localizaría en los medios fríos, ya que requiere mucho la participación del lector especialmente, no importa si está presente o no el que escribió el artículo, basta con tener la revista y leer. En comparación de la radio por ejemplo, que es un medio cálido ya que da información y requiere de la participación del escritor, locutor y oyente para que se pueda originar un mensaje claro y por lo tanto pueda ser un medio.

Esa es una desventaja de los medios escritos, que muchas veces sí cumplen con su papel de informar, pero aísla al lector, metiéndolo en un mundo donde sólo interviene él y lo que está leyendo, no permite una interrelación completa y directa entre los que hacen la noticia y los que la reciben.

Hasta el momento se han dado o expuesto algunas de las características con las que cumple la revista Proceso para que sea un medio de comunicación, así como también algunas de las características que posee como medio escrito. Ahora también es importante señalar que como todos los demás medios de comunicación, también Proceso puede mostrar al lector diversos puntos de vista en sus notas, ya que trata de dar a conocer lo que hay en diversos sectores de la sociedad.

Entonces si se habla de sectores, esto hace referencia a que Proceso puede ser leído por todo tipo de personas y es precisamente lo que hace importante a un medio de comunicación, el interés que hay por parte del público hacia este medio, el interés del lector es lo que hace posible que el medio exista, se distribuya, informe y cause algún efecto en quien está recibiendo la información. Pues un contenido que no capta la atención del receptor es algo sin fondo y por lo tanto sin interés.

Por ello es que a este tipo de revistas les toca la gran tarea de hacer atractiva su información a través de imágenes que comuniquen algo, porque muchas veces se dice que una imagen comunica más que las propias palabras, así como también a las notas se les puede dar color en sus fotografías y contenidos, pues deben tratar de acaparar al público, porque de lo contrario la televisión va a seguir ganando terreno.

Otra característica es que un medio escrito debe mantener el mismo nivel de tono y actitud a lo largo de la nota para que así el lector se adentre y familiarice con lo que se está presentando ante sus ojos, pues una información banal y escasa no es importante y mucho menos atractiva para alguien que sí quiere estar enterado de algo. En el caso de Proceso, al leer sus notas el lector se puede percatar que mantiene su mismo tono de análisis a lo largo de lo que se presenta, aunque hay que recordar que sí hay ocasiones en las que favorece a un solo sector de la sociedad.

Y no hay que olvidar que como todo medio también entre sus páginas hay un poco de publicidad, sólo que sí la presenta con moderación a comparación de otras revistas que se caracterizan por tener un alto contenido de publicidad. En el caso de Proceso llega a tener una que otra propaganda comercial y otra que se refiere a causas sociales como el caso de los spots presentados por CONAGUA para hacer “conciencia”de la importancia del líquido.

Hasta aquí estas fueron algunas de las características que muestran a la revista Proceso como un medio de comunicación, pues cubre con los requisitos de los medios, además de contar con una estructura desarrollada a lo largo de sus páginas para mostrar información al lector y lo más importante comunicar algo que es de interés público.
Por último sería importante señalar algo que menciona McLuhan con respecto a lo anterior, cuando menciona y tiene razón que los dueños de los medios siempre intentan darle al público lo que este quiere, debido a que sienten que su poder está en el medio y no en el mensaje, ni en el programa.

Análisis Ideologico

En este apartado apartado se encontraria el artículo completo de la revista proceso que analizamos, en esté se marcaron en un recuadro los modos y estrategias de operación ideológico que en el texto fueron encontrados, con un respectivo color que marca de que tipo y modo se trata, cada uno con un hipervínculo que conduce a la explicación del modo y la estrategia que ahí se encontró: legitimación, simulacion, unificación, frgamentación y cosificación.

Pero debido a que el trabajo fue hecho en formato web de Word nos es imposible presentar el trabajo por este medio, siendo así que lo trataremos de subir lo más pronto posible. Pero qu´pi están algunos ejemplos:

"Al finalizar las campañas de 2006, el Instituto Federal
Electoral encontró serias discrepancias entre el gasto en promocionales
reportado por los partidos y el monitoreo realizado por la Comisión de
Fiscalización del instituto. Haciendo cuentas, llegó a la conclusión de que
faltó documentar más de 280 mil spots con un costo estimado de mil millones de
pesos. Esa cifra demuestra que el derroche fue mayor que el admitido por las
cúpulas políticas e implicaría que en elección presidencial se rebasaron topes
de gastos."


"En ese fragmento encontramos que se utiliza el modo de legitimación con la estrategia de racionalización ya que el autor busco una forma de razonamientos o justificación de relaciones para hacer entender algo en este caso al lector, el autor justifica que es lo que paso para que el IFE se diera cuenta de que hubo gasto desmedido, relacionando así el estudio, el monitoreo y la conclusión que arrojo esté. Para que así el lector crea o se interesa que en realidad hubo un despilfarro que el autor apoya con cifras.

También se encuentra la narrativización porque construye una historia que recurre al pasado, toca lo que lo que sucede a continuación y que pasa en el presente, que es la situación de cómo las televisoras y los partidos están tratando el problema. Pero todo plantado de forma de historia, es decir, una introducción del problema, el nudo y la conclusión que dejo esa situación. De cierto modo la causa y los efectos de una cierta situación.

"Un escándalo de despilfarro y rebase de
topes de gastos de campaña para financiar promocionales durante la campaña
presidencial amenaza con convertirse a partir de esta semana en el spotgate de
la contienda de 2006…"
En esta parte del artículo se encuentra modo de legitimación con la estrategia de universalización ya que por medio de esta expresión de que es un despilfarro y la amenaza hace de un tema que en si solo interesa a los partidos y al IFE directamente, lo hace mostrar como los intereses de los lectores, que aunque en cierto modos si es dinero de los ciudadanos, en sí que solo se sepa afecta tanto a los partidos como en consecuencia a las televisoras que son quienes reciben este dinero aún sabiendo que no es legal.

"…que pondrá a la luz el “triangulo perverso” de la relación
entre partidos, dinero y medios electrónicos, en especial la televisión
comercial, que cocnentró durante 2006 un total de mil 383 millones de pesos en
spots, 40% de todos los egresos fiscalización por el IFE y más de 60 % de la
inversión publicitaria en todos los medios."

En este fragmento se encontró el modo de fragmentación tanto la estrategia de diferenciación como la de expurgación del otro, ya que el autor al mencionar “triangulo perverso” deja ver a los partidos, dinero y medios electrónicos como un enemigo, exponiendo su relación como algo a lo cual debemos de estar en contra.

La diferenciación se encuentra cuando ya después de dejar claro que la relación se vincula fuertemente con todo tipo de medio, el autor opta por hacer hincapié que el que más beneficios saca de esta relación es al televisión diferenciándolos de los demás medios y poniéndola más en el ojo del huracán.

Pero al igual dentro de está parte se encuentra el modo de simulación que se planteara a continuación. Se encontró también el modo de simulación con la estrategia de sustitución al igual que tropo (sinecdoque), la primera estrategia se encuentra en la connotación de spot-gate, que lleva a la relación de por ejemplo pemexgate que enlaza a una serie de connotaciones de un caso donde hay inconsistencias político-económicas. La segunda estrategia de sinecdoque se encuentra tiene que ver con esta particular “gate” que desde el principio es un termino que representa parte de cómo ya se mencionó un caso en el cual hay inconsistencias y que tiene que ver con el poder político o de alguna institución.

"Esta cifra representa 25% de los 281 mil 26 promocionales
que forman parte del
spotgate. "

Se encuentra el modo de cosificación con la estrategia de normalización ya que al poner spotgate ya suprime actores o acciones, esta palabra spotgate al ser utilizada representan este proceso como sucesos que ocurren en ausencia de un sujeto productor y presentan al tiempo como una extensión continua del presente.

Enlace entre la Teoría el Contexto y la Forma Simbólica

La Revista Proceso es un medio de comunicación masiva, que va dirigido para un público en particular, puesto que el contenido que maneja es de tipo político, encaminado para todo aquel lector que tenga nociones y quiera hacer hincapié con respecto al tema que le interesa.

Cabe aclarar que Jenaro Villamil, autor del artículo “Hacia el spotgate” ha mostrado a través de sus escritos sus tendencias políticas, lo que manifiesta la ideología que pudo haber establecido al escribirlo.

Al investigar sobre éste artículo se hizo empleo de dos análisis, tanto el semiótico como el ideológico. Ya que uno va ligado al otro, es decir, el texto tiene demasiada influencia con las imágenes, pues ambos demuestran la absurda tendencia izquierdista, que en caso de la revista Proceso suele ser muy reflejado.

Las teorías que se desarrollaron para lograr nuestro objetivo a través del artículo “Hacia el spotagete”, se empleo la teoría de Charles Sanders Peirce y Umberto Eco, que si bien fue de gran ayuda; Peirce con la semiosis (proceso en que algo funciona como signo, es decir; la función del signo para transmitir un significado) y sus categorías de los signos, formando así su famoso modelo tricotómico integrado por signos, íconos e indicios. En cuanto a Eco, con su modelo de análisis estructural de los mensajes, donde hace referencia tanto al registro visual como al del mensaje escrito, de aquí la importancia entre las fotografías y el texto.

A través de estas dos teorías pudimos detectar aquéllos signos que irrevocablemente no se le muestran al lector, disgregando y haciendo la localización de los signos que éstos dos teóricos nos presentan, que simplemente no pueden ser detectados amenos de ser “críticos con los medios”, con todo lo que se escribe, se ve y se escucha. A aquellos signos que permiten referirse a una cosa sin necesidad de hacerla presente en su materialidad. De símbolos que el ser humano dispone, de otro sistema de conocimiento indirecto que hace posible en nuestra conciencia de una realidad ausente[1].

En todo momento, no sólo en este articulo analizado se ve reflejado el uso de la semiótica ya que estamos rodeados por ella, sobre todo cuando existe la selección de signos que se utiliza inconsciente o concientemente, a través de una manipulación mediática, sobre todo de los medios de comunicación, donde aparenta el mensaje para alterar nuestras emociones y hacernos ver algo que verdaderamente no es, lo que provoca que el mensaje tenga por objeto otro mensaje y sólo pretende atraer la atención del receptor.

En caso de “spotgate” más que hacernos votar por el partido, nos hace pensar en votar por el personaje al frente del partido, sobre todo al destacar la imagen de López Obrador y Calderón, estos dos personajes importantes en el mundo de la política con una gran controversia ante la voz popular.
Es por esto que al utilizar estas teorías y los métodos de análisis procuramos crear una conciencia semiótica e ideológica para que el elector tome en consideración el papel que juegan los signos frente a los medios de comunicación. De aquí que Umberto Eco y Peirce, hayan sido los dos mejores teóricos para analizar “Hacia el spotgate”.

No obstante, las formas simbólicas se insertan en contextos sociales e históricos; como construcciones simbólicas significativas, por lo que nuestros métodos de análisis fueron los adecuados. Pues de acuerdo con la hermenéutica se debe revisar los métodos de análisis apropiados.

Retomando la metodología de la hermenéutica profunda nos fue de gran ayuda, ya que al utilizarla nos proporcionó un marco en el cual se pudo interrelacionar de manera sistemática estos diferentes métodos de análisis, así como valorar sus ventajas y definir sus límites.

Misma que nos permitió recalcar que los sujetos que constituyen el mundo social se insertan siempre en tradiciones históricas. Efectivamente los seres humanos somos parte de la historia, y no sólo observadores de ella.

Es importante retomar lo anterior, ya que al principio del trabajo se realizó una búsqueda de información histórico-social del surgimiento de la revista Proceso, como ruptura del diario Excélsior. A lo que nos referimos, es que las rivalidades y los acuerdos entre los medios de comunicación buscan establecer lazos con otros medios para ejercer presión sobre otros. Y estos mismos medios pueden ser apoyados por terceros, como lo es el caso de la política que busca apoyo de ciertos patrones que auxilien sus objetivos para lograr dominio.

Lo que nos remite al análisis de la fotografías del articulo, ya que algunos de ellos mantiene el logotipo Televisa. Que si se enlazan; es de suponer que estos políticos cuentan con el apoyo y respaldo de la cadena de televisión De aquí que el lector debe analizar los signos, códigos e indicios que están presentes, pues las formas simbólicas son capaces de representar y simbolizar todo aquello que parece poco incuestionable.

Con la utilización de la hermenéutica se enmendó creativamente un sentido global de los comportamientos y acontecimientos observados. La interpretación que reconstruye las formas simbólicas; qué es lo que representan y lo que se dice acerca de lo representado. Además esta metodología se orienta al análisis de las ideologías, donde el interés es detectar como el discurso moviliza el sentido de la dominación.

Por ende este artículo se enfoca principalmente al problema que se produjo con la Reforma Electoral, respectivamente a la agenda de gastos en publicidad a través de los medios de comunicación que emplearon los partidos políticos PRI, PAN y PRD. La ley Electoral ha reducido gastos a los partidos políticos por lo que las cadenas de televisión tienden a perder millones de pesos, pero estos medios nos lo hacen ver como una forma de corrupción; lo que realmente no es, y lo que ellos buscan es un interés propio a base de nosotros.

La hermenéutica, hace más viable el análisis semiótico e ideológico pues no sólo se interpretan textos para fijar su verdadero sentido, también el de las imágenes, pues estas nos pueden mostrar más allá de lo visible, en cuanto a colores, posturas, gestos, etc. de los políticos. La comprensión es un proceso de reconstrucción por parte del lector, de la intención original del autor. En este sentido, será más fácil tener una empatía con el autor y darnos cuanta de los que nos quiere dar a entender.

En lo que corresponde a las fotografías que abarca más de la mitad del artículo. Nos trata de dar a concebir lo que cada partido político nos puede ofrecer o lo que se puede lograr con ellos. Debajo de la foto de Felipe Calderón y Roberto Madrazo se encuentra en letras blancas “Hacia el spotgate” como indicio de robo y fraude que ambos han cometido. Los fondos que se proyectan son diferentes, ya que muestran la “apariencia” que cada uno representa.

Mientras una imagen muestra un fondo hogareño, la otra se muestra con un fondo sobrio, por medio de esta iconografía el autor da una construcción de la realidad y de su visión del personaje

Además tratándose de la revista Proceso el campo político se engrandece en sus disertaciones que contraponen a la política de “derecha” y a la de “izquierda”. Reproduciendo una visión política-social de la realidad que promueve el periodismo

De esta manera cabe destacar que la hermenéutica profunda, nos permitió analizar las formas simbólicas, dicho marco que pone de relieve al objeto de análisis como una construcción simbólica significativa que requiere de una explicación. Gracias a la metodología, logramos hacer una fusión entre el artículo y los métodos de análisis; para explicar aquello que tiene un doble sentido.

[1] Goragalza Luís, La interpretación de los símbolos, Hermenéutica y lenguaje en la filosofía actual. Edit. Antropos, Barcelona 1990, pág. 206
[1] Goragalza Luís, La interpretación de los símbolos, Hermenéutica y lenguaje en la filosofía actual. Edit. Antropos, Barcelona 1990, pág. 206

Puntos de Utilidad e Interés en Relación con la Técnica

Para lograr la reinterpretación del artículo “Hacia el spotgate”, se hizo uso de varios recursos; entre los que se encuentran las técnicas utilizadas. Se empleo tanto de la técnica de análisis semiótico como de la técnica del análisis ideológico.

El análisis semiótico se empleo para detectar los signos que están presentes ya que es indispensable para entender la comunicación, y la semiótica es fundamental para poder interpretar los signos, pues estos pueden ser imperceptibles e intangibles. Pero que podemos interpretar si se observa muy rigurosamente. El análisis semiótico se realizó tanto para las imágenes como para el texto, ya que si se hubiese descartado alguna de las dos teorías no sería posible entender lo que Jenaro Villamil, autor del artículo nos quiso decir. Es por eso que nos valimos tanto de Eco como de Peirce; pues ambas teorías se puede entrelazar para hacer un mejor análisis

Umberto Eco nos permite examinar a través de los elementos para el análisis del mensaje visual, modelo que permite unificar diversos fenómenos bajo un único punto de vista.

Su sistema es una forma de organización de la estructura, lo que hace comprensible y comunicable una situación producida por el emisor. Este sistema cuanta con partes fundamentales, que en el caso del articulo “hacia el spotgate” por lo que los personajes, letras, encuadres y situaciones se encuentran relacionados.

Su modelo de análisis estructural de los mensajes, fue de gran utilidad ya que su explicación se basa en códigos. Mismos que se pueden encontrar en lo que el define como registro visual, registro verbal o mensaje escrito, y la relación entre ambos.

El registro visual lo empleamos al hacer la denotación de la imagen; describiendo aquellos objetos o personas que objetivamente están presentes en el mensaje. Aquí se detalló lo que la imagen nos propicia, ya sean ideas que surgen a partir de lo que observamos. También en los diferentes tipos de encuadre con el que cada político se mostraba; a partir de la observación de las imágenes detallamos, los signos, iconos y símbolos.

El registro verbal se tomaron en cuenta todas las palabras del anuncio: cabe recalcar que Eco las define como función de anclaje y función de relevo; en donde uno confirma y el otro completa. Finalmente cuando se hizo la relación entre los dos registros, se pudo interpretar

En cuanto al análisis ideológico nos sirvió para detectar que tipo de poder se emplea en el texto. Pues los argumentos pueden ser utilizados como una forma de dominación y es presentada por medio de las ideas y razonamientos que el autor intenta establecer en el lector. Y si bien, sabemos que la revista Proceso es un medio de comunicación que provoca que nos dejemos llevar por lo que se lee.

El análisis ideológico, es un modo general de operación, por medio de la legitimación, simulación, unificación, fragmentación y cosificación; mismas que cuentan con estrategias típicas de operación ideológica.

Estos modos pretenden hacernos entender diferentes pensamientos; a través de los textos nos tratan de dar una doble cara, es por eso que al haber utilizado la técnica de análisis ideológico nos permitió reflexionar, indagar e investigar en el contenido del texto de “Hacia el spotgate” lo que nos trata de dar a entender.

Pues el contenido del artículo nos pudo revelar las relaciones de dominación; pueden ser justas, incluso pueden estar ocultas, o pueden aparecer de forma simbólica y hasta mostrar los procesos históricos como si fuesen sucesos permanentes y que aun nos afectan.

Sin embargo al igual que las imágenes debemos ser cuidadosos en lo que vemos, y en lo que leemos, ya que nos podemos dejar llevar por los medios de comunicación y si no hacemos un análisis riguroso las consecuencias pueden ser fatales, pues retomaríamos una ideología que no nos corresponde.

Como se podrá leer; amabas técnicas fueron muy útiles y eficaces para desarrollar éste trabajo de investigación que más que nada nos hace ser más críticos con los medios que se nos presenta, ya sea, revistas, anuncios publicitarios, diarios, radio, televisión, etc.